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Los altos precios del petróleo

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Los apocalípticos están aprovechando que los precios del petróleo están altos para redoblar sus esfuerzos para hacer llegar a la gente su mensaje. Esto se acaba, el capitalismo nos ha traído al desastre, pero todavía si se nos hace caso, podemos rectificar. Vamos a agotar el petróleo en breve y hay que demostrar, por tanto, la sociedad industrial basada en el oro negro.

No son los únicos que reaccionan a los precios altos. Lo hace todo el mundo. Los trabajadores en Estados Unidos, cuando su labor se lo permite y el jefe accede, están probando a trabajar al menos un día en casa, según recogía un reportaje reciente del Washington Times. Otra de las formas de reaccionar ante los precios consiste en comprar coches que consuman menos, o que puedan utilizar Etanol. Todo ello se pudo ver en la feria de coches de Chicago de hace solo un mes, el 8 de febrero.

El etanol, precisamente, nos permite llegar a la respuesta de la industria buscando sustitutivos y mejoras en la eficiencia energética para sortear los precios más altos del petróleo. El etanol se hace económico cuando el petróleo se encarece lo suficiente. Y el etanol se puede obtener tanto en el campo, como de la biomasa, del gas natural o del carbón. Y solo con el carbón, el que se produce en Estados Unidos daría para hacer funcionar el parque de coches de ese país durante más de 500 años. Ya hay sitios donde se apuesta por esta alternativa: En Brasil "el porcentaje de ventas de nuevos coches que pueden utilizar etanol de alto contenido ha aumentado del 4 al 67 por ciento en los tres últimos años".

Por lo que se refiere a la eficiencia energética, recordaba un reciente artículo del Wall Street Journal que "las ganancias en eficiencia energética más rápidas en los Estados Unidos tuvieron lugar cuando los precios eran muy altos. Desde (1973), la cantidad de energía necesaria para producir cada dólar real de PIB ha caído en un 50 por ciento, una caída de entorno al 2 por ciento de media". Un progreso que se había detenido, pero "hoy estamos de nuevo ante los incentivos positivos por los altos precios del petróleo". Pone como ejempo que "la nanotecnología está mejorando la vida de las baterías, lo que hace los coches de motor híbrido más realistas".

¿Y la propia industria del petróleo? Lo decía Daniel Yergin, en agosto del pasado año:

Entre 2004 y 2010, la capacidad de producción, con las inversiones actuales, aumentará en 16 millones de barriles, pasando de los 85 actuales a 101 por día. Un incremento del 20 por ciento. Otro artículo del Financial Times, de septiembre, explicaba que "los grandes productores de petróleo han aumentado la inversión en la exploración de petróleo de forma significativa, por primera vez en casi dos décadas".

Y se desarrollan nuevas técnicas para mejorar la explotación de los pozos ya abiertos. Por ejemplo, hay otras tecnologías para mejorar la explotación de los pozos. Por ejemplo, se utiliza dióxido de carbono, que se inyecta, para movilizar el petróleo hacia donde sea más fácilmente explotable. También se está desarrollando la tecnología del perforado horizontal. Explicaba un artículo de la CNN que estamos siguiendo, que "un simple pozo horizontal a menudo produce más petróleo que muchos pozos convencionales. La extracción horizontal se está utilizando de forma extensiva en las costas de Canadá y Rusia". También está la inyección de microbios, que "producen una sustancia parecida a un detergente, que volcada sobre los pozos hacen el petróleo menos viscoso", lo que permite una mejor explotación.

Mientras que los apocalípticos, los maltusianos, aprovechan los altos precios para intentar vender sus ideas, la gente se acomoda a ellos y busca soluciones. Eso es el mercado.

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